No cumplo años, cumplo sueños!

Hoy después de casi dos años de no escribir me dieron ganas de hacerlo y lo considero un auto-regalo de cumple. 

Hace ya varios años, desde que Navidad se volvió mas un conteo de ausencias que una celebración, mi cumpleaños pasó a ser el día mas importante del año para mi.

Siempre me gustó celebrarlo, recibir amigos en casa, preparar comida rica, que mi mamá me haga la clásica torta con durazno, dulce de leche y crema. Limpiar el departamento para terminar a las 2 am limpiando todo  de nuevo, pues la obse no se podía ir a dormir sin que todo esté en orden.

Cuando me mude a Irlanda, una de las primeras cosas que pensé fue que finalmente tendría cumpleaños de verano. Pero en Irlanda nunca nada es lo que uno espera..mi primer año en Dublin hacia frio, estaba nublado y el verano solo estaba en el vestido floreado que use en la fiesta de compromiso a la que fuimos invitados en un Castleblayney, un pueblito a unas 2 horas de Dublin.

Castleblayney

Torta de alfajor Havana

En el medio de la fiesta, los novios me sorprendieron con una torta de alfajores Havana para que pueda soplar las velitas.

Cuando volví a Dublin en 2014, decidí que aprovechando que el primer Lunes de Junio es Bank Holiday (feriado) en Irlanda, iba a tratar de viajar para cada cumple. Sería mi auto-regalo en busca de sol. 

El primer destino, estaba fuera de cuestionamiento: New York! Venía soñando con volver a esa ciudad que me explotó la cabeza, que me hizo cambiar la forma de ver la vida.

Regresar a New York fue el primer sueño hecho realidad, volver a recorrer esas calles abarrotadas de gente, ver los taxis amarillos, los edificios altos, volver a ver a Lili, Angie, Los De la Rosa, a los asados en lo de los Vitus, a tomar un café con Ernesto, a visitar a los amigos de Café Metro.

Festejamos varios días de seguido. Primero organizaron una reunión en Princeton y Angie me hizo una torta Tres Leche. El día antes de mi cumple, fuimos con Angie a Atlantic City, recorrimos la playa, jugamos en el Casino, comimos rico, probamos tragos y lo pasamos super recibiendo mi cumple en la ciudad costera.

El día de mi cumple regresamos a New York y las chicas me sorprendieron con una reserva en 230 Fifth Rooftop, una terraza increible donde comimos con el Empire Stite de fondo.

Rooftop Bar

 

No le podía pedir nada más al primer viaje de cumple, fue como siempre que me encuentro con esta gente: mejor de lo que esperaba. Porque desde el momento uno, siempre supe que el lugar es lo de menos, la diferencia la marca la gente que te rodea y yo con este grupete de amigas de los NewYorkers (como dice Lili) me gané el cielo ♥

NY, NY

 

En 2015, si no recuerdo mal era Abril y estabamos en un parque tomando mates con las chicas cuando les pregunte si se sumaban a un viaje conmigo por mi cumple. Empezamos a barajar ideas y por ahi surgio Sardegna, una isla bien al Sur de Italia que ninguna conocía más que por comentarios increíbles que escuchamos de gente que había ido. 

Conseguimos vuelos via Roma ( Pau y Eli no conocían). La escala terrible de 7 horas, resultó perfecta para que al menos lleguemos hasta el Colisseo, solo para darle la vuelta alrededor, caminar por la Via Nazionale, pasar por el monumento a Vittorio Emanuele, caminar por Via del Corso hasta la Fontana y volver al aeropuerto. Seguimos camino a la Islita a la que llegamos super tarde. Llegaron Naty y Ernesto desde Londres para completar el equipo. Comimos fideos con atún y nos fuimos a dormir muertas esperando descubrir el paraiso que nos esperaba al día siguiente.

Playa La Maria Pia

La playa de Stitino, donde pasamos mi cumple viene siendo hasta ahora una de las playas mas hermosas que conocí en mi vida y a pesar de que principio de Junio todavía no es temporada y el agua esta bastante fria lo disfrutamos a full.

Stintino, La Peloza

En 2016, la aventura fue a Croacia. Pau estaba viajando con su familia y llegaban desde Italia a Croacia. Nosotros volamos a Zadar y después tomamos un bus directo a Dubrovnik.

Otra ciudad de ensueño, con pisos de marmol blanco en todo el caso historico. Playas de piedra y aguas acquamarina.

Recorrimos la ciudad, fuimos a Islitas alreadedor y hasta terminamos bailando al ritmo de un dj en el medio del Old Town.

En 2017, cumplí 30. El año de mayor revolución para mí, estaba en Italia haciendo mi pasaporte y me volví a Dublin para poder viajar con las chicas a Tenerife. 

Nos fuimos las 4 a disfrutar 5 días de la Islita. Pau se pusó la 10 y se manejo todo, por lo que la pudimos recorrer de punta a punta. Las chicas me organizaron un festejo sorpresa y fuimos a pasar el día a un parque acuatico. Cuando me lo dijeron, dude un poco y terminó siendo uno de los mejores festejos de cumple de la historia. Todavía nos seguimos riendo de las anécdotas de ese día, eramos como 4 niñas subiendo y bajando una y otra vez de los juegos.

En 2018, se deshicieron de mi y me mandaron a viajar con Shane. Desde ese año los viajes en grupo los mudamos a Julio que el clima es más seguro de verano y aprovechamos a festejar el día del amigo en algún lugar de playa (pero eso irá en otro post..si me inspiro de nuevo).

Cambiamos el rumbo, de playa a ciudad. Cuando habia viajado sola en 2013 pase por Turquia y me había quedado con las ganas de Cappadocia. Asi llegamos a esta ciudad mágica, donde sobresalen las cuevas y pude cumplir uno de mis sueños: volar en Globo aerostatico.

Esta ciudad llena de historia y magia también fue la testigo de que nos confirmen que nos elegían para el departamento que habíamos ido a ver justo antes de viajar. Al regresar de ese viaje nos mudamos juntos y el Globo de ceramica que tengo en mi cocina me la recuerda siempre.

En 2019 fuimos a recorrer la Costa Amalfi, y aunque el clima no ayudo los primeros días igual la disfrutamos con lluvia y un poquito de frio.

Como soy una bendecida, el día de mi cumple salió el sol y pudimos hacer un tour en barco a la Isla de Capri.

 

Este 2020 vino a revolucionarnos la vida a todos. Siento que esta cuarentena fue de mucho aprendizaje. Quizás tocaba dejar de “volar” y volver a “pisar la tierra”, reconectar con las raices. 

Desde que estamos en cuarentena nos dedicamos mucho al patio de la casa en la que vivimos hace casi dos años y nunca habíamos hecho más que cortar el pasto. Ahora plantamos flores, armamos un set de jardin con pallets. Merendamos, almorzamos y cenamos afuera, hago clases de gimnasia, bailo, pinto (o trato), Shane trabaja, escuchamos Jazz y lo estamos pasando super.

Pienso que mi papá debe estar contento que este a full con el jardin, que haya plantado un malbón de flores rojas por él, Que mi Abu se habrá puesto feliz que me acordé que ella plantaba las cebollas de verdeo y crecían super fácil y rápido.

Mañana pasaré mi cumple por primera vez en Dublin desde que volví en 2014. Y estoy contenta de que sea acá, en el patio de casa.

Soy bendecida de tener amigos que valen oro, y me acompañan a un parque o a una ciudad nueva. De haber encontrado un compañero de aventuras con el que me divierto igual en un tour en barco en el Mediterráneo o bailando Chamamé en el living de mi casa. Que mi familia calcule las horas de diferencia para saludarme a las 12 en punto, no importa donde yo decida pasarlo.

Este año el viaje es al interior y he descubierto muchos nuevos lugares y matices dentro de mi misma ☺ 

 

Oh La La Paris! 🗼

Mi relación con Paris fue de ODIO/AMOR. Es una de las pocas ciudades a las que he vuelto… Y fue mas en plan de darle una segunda oportunidad y tratar de descubrir esa ciudad maravillosa que enamora a tantos y que yo había odiado.

Mi primera vez en Paris fue para recibir el año nuevo 2013. Parte de ese Eurotour clásico, ultra planificado hasta el ultimo segundo y con expectativas a 10 mil metros sobre el nivel del mar.

Paris-Diciembre 2012

De esta primera experiencia, solo voy a contarles cosas generales porque volví odiando Paris. De nuevo, el combo de viajar en invierno y esperar demasiado de la ciudad, seguro sale mal.

Nosotros arribamos un 28 de Diciembre muy tarde de noche y gracias a Dios, al buen sistema de metro y a Google maps llegamos sanos y salvos al hotel. Porque si tenes que depender de la colaboración del Parisino, vas muerto jajaja. No les gusta hablar ingles, entienden muy poco de español y encima pretenden que tu pronunciación en francés sea perfecta. Gente difícil, si las hay…aunque obviamente, como toda regla tiene sus excepciones. Los días se hacían muy cortos, arrancabamos super temprano por la mañana y a las 4,30 de la tarde ya se hacia de noche. Sumado a eso, el año nuevo no fue nada de lo que yo me había imaginado. Soñaba con recibir el año nuevo cerca de la Torre Eiffel, tomando un champagne frances y disfrutando de los fuegos artificiales. ILUSA! Nada de eso paso, ese año el Presidente decidió aplicar un plan de austeridad y no hubo fuegos artificiales, cerraron el acceso a la Torre a las 9 de la noche y para completar se largo a llover. En conclusión, terminamos cenando en un restaurante chino cerca del hotel y a la manana siguiente nos amargamos viendo en el noticiero como habían recibido el 2013 con bombos y platillos en las principales capitales  del mundo, excepto en Paris.

Párrafo aparte el paseo por el Palacio de Versalles, haciendo una hora y media de cola para entrar con 3 grados. Sumado a eso los jardines sin flores y las estatuas cubiertas con lonas de plástico para protegerlas de la helada…AME PARIS! jajaja

Tres años después, la posibilidad de volver a Paris surgió porque mi amiga y compañera de piso Pau soñaba con conocer la ciudad de las luces. Yo la aconsejaba con no ilusionarse tanto, con esperar poco, con ver si realmente valia la pena…pero ahi estaban una de esas mega ofertas de RyanAir en pleno Agosto, para ir a re-descubrir Paris en verano.

Después de deliberar un poco y con el enganche de ir a Disney Paris, decidimos pasar una semana entera recorriendo la ciudad que inspiro a Cortazar a escribir Rayuela y a Hemingway a decir que en “Paris vivían las personas mas interesantes del mundo”.

Verano en Paris

Asi como las mujeres nos ponemos mas lindas cuando llega el verano, a Paris le paso lo mismo. La ciudad era una fiesta de colores por donde la mires, todo brillaba, todo se veía mas luminoso. Tome la firme decisión de borrar de mis recuerdos la vez anterior y dejarme sorprender por la ciudad como si fuera la primera vez. Enhorabuena!

Llegamos a nuestro departamento en Paris al mediodía, y nos maravillamos al ver que desde nuestra ventana teníamos una vista privilegiada que incluía en primer plano a La Catedral del Sacre Coeur.

La vista desde nuestra ventana

Después de adaptar nuestros outfits al verano Parisino, salimos dispuestas a descubrir la ciudad. Almorzamos en un restaurant chino del Barrio Latino y después caminamos por la orilla del Sena, hasta llegar a la Isla de la Cité. El recorrido siguió por el Puente de las Artes, famoso por ser el lugar donde los enamorados dejan sus candados con sus iniciales y se prometen amor eterno. Una de esas cosas que a mi me resultan un poco difíciles de entender, porque representar el amor con una cerradura de la cual no podes escapar, mas que romántico me parece tenebroso jajaja.  En fin, después de cruzar el puente fuimos al Patio del Louvre donde se encuentran las famosas pirámides de cristal, intentamos mil veces la foto tocando la punta de las mismas y seguimos camino hacia los Jardines de Tullerias, pasando obviamente por el Arco del Triunfo de Carrousel. Cuenta la leyenda urbana que Napoleón no pudo aguantar la ansiedad y esperar el tiempo que llevaba la construcción del Arco del Triunfo que en ese periodo mando a construir este mas pequeño. En los Jardines de Tullerias, nos sentamos en esas sillas de hierro verde a tomar un helado y simplemente disfrutar del momento, viendo gente pasar…cada uno en su mundo, disfrutando a su manera.

Patio del Louvre

Seguimos el recorrido hacia la Plaza de la Concordia que sirve de marco de acceso a los Champs Elysees, no pudimos resistir tomarnos una de esas bici-taxi hasta el Arco del Triunfo. Esos 10 minutos que duro el trayecto no parabamos de reinos, y admirar los edificios a nuestro paso. El Arco del Triunfo era todavía mas impresionante de lo que recordaba, cruzamos por los tuneles subterráneos y dimos vuelta alrededor del monumento fascinadas por su grandeza. Volvimos caminando por Champs Elysees, mirando vidrieras (porque imposible comprar algo jajaja) hasta Plaza de la Concordia…estábamos agotadas! Asi terminaba nuestro primer día en Paris.

Notre Dame

El segundo dia arrancamos temprano para poder hacer el Sandemans Free Walking tour. Esta compañía se encuentra en las principales ciudades europeas y realizan tours caminando alrededor de la misma. Sus guías son super entusiastas y le ponen mucha onda, se les paga a voluntad al terminar el tour. Es una opción ideal para los que viajan solos, de paso se conoce gente que esta igual que uno. A mi personalmente me encantan, porque te da un pantallazo general de la ciudad y después uno profundiza lo que mas le haya gustado, ademas de seguir las recomendaciones del guía respecto de otros lugares para ver. El tour comienza en la Fuente de St Michell, a pocos metros de la Catedral de Notre Dame.  Nuestra guia era una chica Argentina que vivía hace un tiempo en Paris y nos conto meticulosamente la historia de cada monumento por el cual pasábamos. Volvimos a caminar por la costa del Sena y nos adentramos en el patio cuadrado del Louvre para escuchar historias de las principales obras de arte y algunas anécdotas graciosas al respecto.

Despues del tour acepte ir con Pau a las Galerias Lafayette, el paraíso de una diseñadora de modas como es ella y el lugar perfecto para que una Mile acalorada disfrute del aire acondicionado jajaja Win-Win! Seguimos caminando por las calles parisinas, siguiendo un poco la intuición y otro poco mis recuerdos de la vez anterior. Asi llegamos al Moulin Rouge, y nos adentramos en el Barrio de Montmartre. Las callecitas se veían hermosas, con flores de colores por todas partes, artistas callejeros ofreciendo pinturas o tocando el bandoneon. El broche de oro del paseo fue llegar a la Catedral del Sacre Coeur, una de las mas hermosas de Europa y desde la cual se tiene una vista privilegiada de la ciudad.

Catedral de Sacre Coeur

Pero el dia no terminaba ahi, esa noche salimos a conocer la noche parisina. Fuimos a Queen, un nightclub en Champs Elysees, muy cerquita del arco del triunfo. Como su nombre lo indica, fuimos reinas por una noche!

Medianoche en Paris

El tercer día en Paris, arrancamos temprano (a pesar de haber salido la noche anterior) y fuimos al Palacio de Versalles. Otra vez unas dos horas de cola, esta vez bajo un sol radiante y 30 grados de calor…igual me queje menos que la vez anterior. Recorrimos cada aposento con meticulosidad, y hasta nos sacamos una selfie con el guardia en la Sala de los Candelabros =P. Dato importante, si sos estudiante menor de 25 anos no se paga el acceso al Palacio de Versalles.

Sala de los Candelabros

Los jardines directamente me dejaron sin palabras, las flores perfectamente ornamentadas para dar forma a combinaciones de colores increíbles. Es solamente, estando ahí cuando tomas consciencia del poderío de esa época.

Flores

Jardines

 

Despues de pasar el dia en Versalles, estabamos muertas...pero no pudimos resistir bajarnos del metro en Trocadero y observar el atardecer con la Torre frente a nosotras. Realmente un espectáculo que combinaba naturaleza con la obra del hombre. Nos fuimos a dormir, agotadas pero maravilladas.

Atardecer en Trocadero.

El cuarto día, fue el dia mágico. Siiiii, las niñas fuimos a Disneyland Paris, donde los sueños se hacen realidad. Vestidas con remeras y zapatillas de Mickey (si, a los 29 anos con remera de Mickey y que?) llegamos con mas ilusiones que los nenes de 6 anos. Nos subimos a absolutamente todos los juegos, nos emocionabamos al ver pasar alguno de los personajes. Hicimos cola para sacarnos fotos con Winnie the Pooh y esperamos ansiosamente el Desfile de las 5 pm.

Con Whinnie The Pooh y nuestros atuendos de Mickey!

Durante el desfile conocimos a una familia española que se estaba hospedando en uno de los hoteles del parque pero que se volvían a casa esa noche. Como no iban a usar los cupones de la cena, nos los regalaron a nosotras. Asi que después de una cena de 3 platos en un restaurante del parque nos quedamos a esperar el show final. Nos encanto!! Los juegos de fuegos artificiales, la música, las luces….todo fue MAGICO y valió la pena. Lo único que llegue a la conclusión que jamas llevaría mis hijos a Disney, que vayan solos a los 15/16 y que se coman las colas y demás por su cuenta…he visto padres sufriendo en una cola por 3 horas para obtener la firma de una princesa o la foto con Mickey! Ademas recomiendo que se lleven comida y agua en las mochilas, todo esta sobrevaluado dentro del parque y salvo que tengas la suerte que tuvimos nosotras, una cena no baja de los 70 euros. Al finalizar el show, alrededor de las 11,30 pm, fuimos literalmente corriendo a la estación del tren para volver a Paris. Otro largo y emocionante dia llegaba a su fin.

Show Final

El quinto día, se podría decir que fue un día en las alturas. A la mañana fuimos a la Torre Eiffel.  El acceso a la Torre tiene diferentes precios dependiendo si es por ascensor (17 euros hasta la cima y 11 euros hasta el 2do piso), o por escaleras a 7 y 5 euros respectivamente). No es indispensable comprar los tickests on line, se pueden conseguir directamente ahi y las colas no son tan largas. A comparación de la vez anterior, ahora realizan controles de seguridad mas estrictos y escanean los bolsos y mochilas, ademas retienen cualquier elemento cortante o peligroso (encendedores, navajas de bolsillo, tenedores, etc).  Sinceramente la vista es otra en verano, podes apreciar la ciudad en todo su esplendor, ver mas a lo lejos. Tenes una vista mas clara de cada lugar, los Champs de Mars brillan mas verdes que nunca, Trocadero se ve hermosa, el sol brilla. En fin, me enamore de la vista. ❤ 

Vista desde la Torre

Vista desde la Torre

Ese día almorzamos en un restaurante cerca de la Torre y nos quedamos recorriendo los campos de Marte, sacándonos miles de fotos y disfrutando del momento. Por la tarde fuimos al Arco del Triunfo, la entrada cuesta 12 euros para adultos y de nuevo si sos estudiante menor de 25 es gratis. Si o si se asciende por escaleras, así q prepárense para enfrentarse a 286 escalones de una escalera caracol con descansos muy pequeños y mucha gente apurandote el paso. El ascensor solo esta reservado para ancianos o personas con dificultades motrices. El monumento, a pesar de parecer mas grande solo tiene 50 metros de alto y 22 de ancho. Pero eso no impide que las vistas desde la Terraza superior sean magnificas. Las 12 principales avenidas de Paris confluyen en la rotonda del Arco formando una estrella, es el lugar con mas trafico de la ciudad y es por eso que se accede a el por túneles subterráneos. Se puede apreciar perfectamente la Avenida de los Champs Elysees, a la izquierda se observa a lo lejos la Catedral del Sacre Coeur y a la derecha la Torre Eiffel. Tambien las demás vistas de los barrios es increíble y el atardecer desde esa terraza no tiene precio.

Panoramica desde el Arco del Triunfo

Al bajar Pau dijo una de las tantas frases celebres del viaje “Vamos a perdernos en Paris”, y así con la torre iluminada como guía empezamos a caminar por esas callecitas y a descubrir edificios, casas, restaurantes fuera del circulo turístico pero no por eso menos hermosos.  De casualidad en uno de los puentes del Sena nos cruzamos con dos chicos argentinos y terminamos caminando juntos hasta el Barrio Latino, donde cenamos e intercambiamos anécdotas viajeras. La gente que uno va conociendo en el camino es lo que hacen a los viajes una mejor experiencia.

Perdidas en Paris!

Llego el ultimo día y no queríamos perdernos nada. Nuevamente arrancamos temprano, directo al Museo del Louvre, donde también los estudiantes menores de 25 entran gratis y si tenes mi suerte de parecer menos de 25 tambien…Le dedicamos alrededor de 3 horas al museo y la verdad no es suficiente. Llegar a la Mona Lisa te toma alrededor de 30 minutos y una vez ahi tenes que luchar con miles de turistas, mas sus dispositivos electrónicos para verla por 3 segundos.

Salimos del museo y todavía disponíamos de un par de horas, decidimos hacer un picnic en los Jardines de Luxemburgo, un parque muy cerca del Barrio Latino, con fuentes y flores hermosas. Nos encanto el lugar, no esta tan abarrotado de gente y hay muchas áreas para sentarse y disfrutar de una burbuja de paz en la locura de la ciudad.

Jardines de Luxemburgo-Nous sommes les plus belles du quartier 🎵🎶

Asi, felices y llenas de nuevas experiencias nos toco volver a Dublin. No sin antes pasar por una demora en el vuelo debido a alguna pequeña falla técnica. Y bueno, si moriamos era despues de haber disfrutado una semana en Paris al maximo!! Oh La La!

 

 

 

 

 

En tren por Italia…

El Raid Italiano duró 5 días y abarco 4 ciudades, fué rápido, agotador pero no por eso menos espectacular. En ese momento era lo que se podía y tratamos de absorver la mayor cantidad de ciudades en el tiempo que teníamos disponible. Hoy, desde otra perspectiva y viviendo de manera permanente de este lado del charco elijo calidad de tiempo en las ciudades, disfrutarlas con calma e ir más allá del punto turístico.

El 25 de Diciembre a las 7 am nos tomamos un tren en Termini con destino a Florencia. Llegamos mal dormidos y muertos de frio, pero con muchas ganas de aprovechar al máximo el día ahí.  Así que después de dejar las cosas en el hotel nos dirigimos a la Piazza del Duomo, que se compone de la Catedral de Santa María de las Flores, El Campanille y El Battisterio de San Giovanni.

La Catedral es una de esas obras arquitectónicas que te dejan estupefacto, de las que no hay fotografía que le haga justicia. Por estar encastrada en el centro de la plaza y rodeada de otros edificios es imposible obtener una vista panorámica y es necesario rodearla desde todos los puntos para apreciarla en su totalidad. Su Campanille, la complementa sin dejar de ser un edificio independiente y hermoso. Ambos están revestidos de marmol blanco, verde y rojo dándole un colorido peculiar a la Plaza. Con sus 84 metros es uno de los edificios más altos de la ciudad y permite una vista privilegiada de la misma. Se consiguen tickets por 15 euros que incluyen la visita a la Catedral, El campanario, el Batisterio y el Museo de la Opera del Duomo.

Catedral de Santa Maria de las Flores y Campanille

Unos pasos hacía la derecha se encuentra el Batisterio de San Giovanni, también revestido en marmol blanco y verde en compose con los otros edificios y es el más antiguo de los 3.  Lo que más me gustó fue la Puerta del Paraiso, que cuenta con 10 paneles de bronce donde se representan escenas del Antiguo Testamento.

Puerta del Paraiso

Seguimos avanzando en nuestro recorrido y al pasar por la Piazza de la República confirme que los italianos al dar indicaciones te mandan “Sempre dirito”. Creo que uno debe caminar derecho hasta cansarse y volver a preguntar, para que alguien te mande derecho hacia algún otro lado y eventualmente llegar a destino. El nuestro era la Piazza della Signora, considerada la más bonita de Florencia. En ella se encuentra el Palacio Vecchio, decorado con esculturas de Adan y Eva, una imitación del David y Hercules. También esta la Logia dei Lanzi, una especie de museo al aire libre donde se exponen esculturas como el Rapto de las Sabinas.  Y encastrada en el centro de la Plaza, la fuente de Neptuno.  Para terminar de enmarcar el panorama, la Plaza esta llena de artistas callejeros ofreciendo sus pinturas, su música o malabares.

Palazzo Vecchio

A 200 metros de la Piazza della Signora y sobre el Río Arno se encuentra el símbolo de Florencia: El Ponte Vecchio. Es el puente de piedra más antiguo de Europa, uno de los pocos puentes habitados (junto al puente de los Suspiros en Venezia y al puente de Pulteney en Bath, Inglaterra) y el epicentro de artistas, turistas y parejas enamoradas en Florencia. En el origen sus casas colgantes eran habitadas por carniceros y familias, pero luego fueron reemplazados por negocios de joyeria y olfebres. También fué el único de los puentes de Florencia que no fué destruido por las tropas alemanas durante la Segunda Guerra Mundial.

Ponte Vecchio

Después de almorzar nos encaminamos rumbo al Monte de Michelangelo para aprovechar las últimas horas del día. La principal desventaja de viajar en invierno es que los días se acortan terriblemente, dependiendo del lugar alrededor de las 4.30 pm ya es de noche. Optamos por ir caminando, para de paso ir viendo la ciudad y sus alrededores. En el camino paramos a pedir indicaciones y cuando le dijimos al Señor que eramos argentinos no paraba de hablarnos del Bati y de su admiración profunda por él. Así, después de 30 minutos caminando en subida y después de atravesar la antigua muralla de la ciudad llegamos a, lo que supongo en un día despejado de sol te regala la mejor vista de la ciudad. La nuestra no fué tan espectacular porque había mucha neblina, pero llegamos a apreciar a lo lejos la cúpula de la Catedral y el Campanille, las luces de Florencia, sus edificios a lo lejos. Después de pasear un rato por ahi, tomar un chocolate caliente y calentar el cuerpo decidimos seguir explorando el área. Así, casi sin querer llegamos a la Basílica de San Miniato al Monte, una iglesia románica del Siglo XI. Así dimos por terminado nuestro maratónico día en Florencia. Después de cenar en un lugar cerca del Ponte Vecchio donde pagamos la pasta más cara de la historia, nos fuimos a dormir.

Al día siguiente nos subimos a un tren con destino a Venecia, demasiado llenos de espectativas (lo cual siempre termina jugando en contra) y con muchas ganas de conocer la mítica ciudad de los canales. Dejenme decirles que en Venecia no sirven los mapas, no hay calles con nombres y todo se reduce a indicaciones tipo ” a tres puentes de la Plaza de San Marcos”. Así entre puentes, y callejones llegamos a nuestro hotel justo enfrente del Ponte Tri Archi.

Nuestro día en Venecia  fué lluvioso y frio, lo cual tergiversa la apreciación de la ciudad. Nos encontramos con una Plaza San Marco inundada,  hicimos una cola interminable bajo la lluvia para entrar a la Básilica y una vez dentro me sentí un poco decepcionada. Demasiado oscura para mi gusto y también demasiado llena de turistas peleando por una mejor toma del altar. Después de almorzar, muertos de frio seguimos el recorrido por el muelle de las góndolas y el Ponte Rialto. No vi mucho más de Venecia y mis recuerdos no son los más positivos…quizás deba darle una segunda oportunidad con mejor clima (?)

 

Venecia

El próximo destino nos eligió a nosotros, caímos por falta de trenes directos y complicación de horarios a Verona. A una hora de Venecia, de camino a Milán con precios de hospedaje accesibles decidimos quedarnos ahí. Y como siempre, cuando menos esperas mejor la pasas. Me encanto Verona!! Es una ciudad chiquita, pintoresca…con puentes romanos que atraviesan el Río Adige. Además de ser el epicentro de una de las historias de amor mas traumaticas de la historia cuenta con otros atractivos casi secretos para el turista medio.

Obviamente, la primer visita fue la Casa di Giulieta. Se entra por un pasillo que desemboca en un patio central y en sus paredes se pueden leer cientos de mensajes, de gente que como la protagonista es capaz de cualquier cosa por amor. Por las dudas, le toqué la teta a la estatua de Julieta para que me de suerte y encuentre al verdadero amor de mi vida. Les debo la foto en el balcón porque no iba a pagar 20 euros por ella! Todo es negocio en esta  vida jajajaja

En la casa de Julieta

Como les decía, la ciudad es muy bonita. Entre los lugares de interes se destaca la Piazza delle Erbe, que era el antiguo foro Romano y donde actualmente hay mercados callejeros donde encontrás desde souvenires hasta comida. Todo un espectáculo donde los locales se confunden con los turistas.

En la parte alta de la ciudad, sobre la colina de San Piedro se encuentra el Teatro Romano. Una construcción al aire libre que data del siglo I A.C. y el cual a pesar de ser monumento arquitectónico se sigue utilizando en la actualidad durante los meses de verano para espectáculos musicales y teatrales. Muy cerca de ahí se encuentra el Castillo de San Pietro y el mirador mas impresionante de Verona. Para llegar a la parte del mirador hay que subir escaleras y calles empinadas, pero la vista realmente vale la pena.

Por último y como frutilla del postre, después de recorrer el centro moderno repleto de negocios, cafés y bares…pasar por una peatonal llena de vida con artistas callejeros exponiendo su arte, llegamos a la Arena de Verona. Es el segundo anfiteatro más grande de la Era Romana, después del Coliseo. Muy similar en aspecto, pero de dimensiones más pequeñas. Con capacidad para albergar 25.000 espectadores, en la actualidad se celebran ahí conciertos y espectáculos de Opera. Realmente, Verona me sorprendió y desde entonces no dejo de recomendarla a quienes viajan por Italia. Es mucho más que Romeo y Julieta, es una ciudad de esas que te enamoran por su humildad.

Arena de Verona

La última parada fué Milan. Sólo estuvimos por unas horas, en las que alcanzamos a visitar El Duomo, la Galeria Vittorio Emmanuele y los alrededores. Lo mejor de Milan fué el sol, la feria de comidas en la parte de atrás del Duomo donde podes probar miles de salames y jamones mientras tratan de convencerte de que les compres uno y la pizza que nos comimos antes de subir al tren.

Duomo de Milan

Así terminaba la gira italiana, sientiendonos un poco en casa, moviendo de más las manos al hablar, con un par de kg extra después de tanta pizza y pasta y hartos de conocer Iglesias!! 

Arriverderci!

Ciao Roma!

Después de 8 meses viviendo en Irlanda y habiendo solo viajado por Reino Unido el 21 de Diciembre de 2012, desafiando todas las predicciones Mayas, me subí a un avión rumbo a Roma. Me bastaron 5 minutos para entender de donde veníamos los Argentinos. Ni bien el conductor del bus empezó a adelantarse a otros vehículos en la ruta, a tocar bocina y gritar me sentí que había vuelto a Argentina.

Coliseo Romano

Roma fué el primer destino del típico Eurotour en el que te atragantas de ciudades en 21 días. Aunque 3 días no fueron suficientes para disfrutarla al 100%, no deja de estar entre los mejores destinos hasta ahora recorridos.

El primer día nos levantamos temprano y después de un desayuno que incluyó todos los carobohidratos posibles y un café bien cargado salimos a “patear” la ciudad! Roma se debe hacer caminando, cada esquina es una sorpresa, un monumento…y hasta lo que no figura en la guía turística te deja sin palabras. Desde los edificios magestuosos, ya sean antiguos o modernos, sus callecitas y cafecitos con manteles a cuadros, el tráfico incesante, los gritos de la gente, los bebederos de los antiguos acueductos romanos y mucho mas.

Nuestro paseo empezo visitando la Basílica de Santa Maria Maggiore, también conocida como la Basílica de Santa Maria de la Nieve, en relación a su origen. Ya que cuenta la leyenda que a través de una nevada en pleno Agosto (mes de verano) la Virgen les anunció el lugar donde debía ser edificada la Iglesia. Es un edificio impresionante cuyos techos y pisos estan integramente decorados y hasta el día de hoy una de las principales Iglesias de Roma. Fué ahí donde Bergoglio fué a rezar al día siguiente de ser elegido Papa.

Dejando atrás la Basílica nos adentramos por la Via Nazionale hasta llegar a la Piazza Venecia y al magestuoso monumento a Vittorio Emanuele, quien fuera el primer rey de la Italia unificada.  Esta integramente construido en marmol blanco y el contraste con el cielo azul de Italia lo hace uno de los monumentos más lindos que ví. Para cerrar el panorama las banderas italianas flameando a lo alto. Además se encuentra allí la tumba del soldado desconocido con la llama eterna en honor a todos los caídos en la Primera Guerra Mundial.

Monumento a Vittorio Emanuele

Seguimos caminando por Via del Corso y nos quedamos comiendo un sandwich de jamón crudo, mozzarella y albahaca en una trattoria de por ahi. Después de la parada estratégica , llegamos a un punto en el que si doblabamos a la derecha llegabamos a la Fontana Di Trevi y si lo hacíamos a la izquierda al Panteón. Creo que no caben dudas de hacía donde fuimos corriendo. Después de recorrer un par de calles laberinto se apareció frente a nosotros: La Fontana Di Trevi, según muchos la fuente mas linda del mundo. (Hasta ahora no he visto una de la época que la iguale). Es realmente hermosa por donde se la mire. Representaba el final de uno de los acueductos principales de la antigua Roma. Fué diseñada por Nicolas Salvi, representa al Dios Neptuno en el centro domando las aguas salvajes y el resto de la iconografía hace referencia al mar con hipocampos y conchas de mar que se mezclan con las rocas y le dan una apariencia real. El telón de fondo es el Palacio Poli que termina de encuadrar la obra para hacerla única. A pesar de la sobredosis de turistas abarrotados para sacarse una foto, tirar la monedita y pedir un deseo no deja de ser uno de los lugares que más disfrute al visitar Roma. El dato curioso es que las monedas arrojadas a la fuente son rescatadas y el dinero recaudado se utiliza para alimentar a ciudadanos en situación de calle.

Fontana Di Trevi

Dejamos atrás la Fontana y nos dirigimos al Panteón de Agripa, un templo de planta circular con el techo abierto a través del cual entra el sol, dedicado a todos los dioses y donde descansan los restos de Vittorio Emanuele. Es una muestra del poderío de ese Imperio del cual leíamos en los libros de la secundaria. Lamentablemente llegamos tarde para disfrutar el show que la naturaleza brinda al permitir la entrada del sol a través del agujero en la cima de la cúpula durante el solsticio de invierno (21 de Diciembre) y el de verano (21 de Junio). Seguimos a través de esas calles mini hasta llegar a la Piazza Navona.

Cúpula del Panteón

La Piazza Navona es una fiesta de la Arquitectura, ya que reune en un solo lugar fuentes, monumentos y edificios uno más lindo que el otro. Cuenta con 3 Fuentes: La de los Cuatro Rios (Nilo, Danubio, Ganges y Río de la Plata), La Fuente de Neptuno, y la Fuente del Moro. En uno de sus extremos esta la Iglesia de Santa Inés en Agonia y el Palacio Pamphili. Además de otros monumentos. Es uno de los lugares elegidos por los turistas y por ende por los vendedores ambulantes, desde carteras de imitación a imanes y dulces.

Piazza Navona

Eran las 5 de la tarde y empezaba a anochecer pero nosotros no podíamos parar de caminar y sorprendernos en cada esquina…casi sin querer llegamos a la Isla Tiberina. Una pequeña isla de origen volcanico ubicada en el Río Tiber que fué eje central del comercio entre las dos orillas en el origen de la ciudad y donde actualmente funciona un hospital. Paseamos por la Isla y cruzamos a través de su clásico puente Romano hacia el Barrio de Trastevere. En mi opinión el barrio más lindo de Roma. Ahí cenamos en un restaurante típico, sin animos de asesinar turistas, unas ricas pastas y de postre obviamente tiramizú. Estabamos agotados, no pude terminar de asimilar todo lo que habían visto mis ojos antes de caer rendida en la cama!

El segundo día en Roma empezó bien temprano, se venía lo que uno sueña con ver cuando va a la capital Italiana: El Coliseo. Ya habíamos tenido una vista general al venir en bus desde el aeropuerto pero fue un flash.

Así que llenos de ansiedad llegamos a la entrada del Foro Romano, que era la zona central de la antigua Roma y donde funcionaban las principales instituciones del imperio, desde el comercio, la religión, la administración de justicia hasta la prostitución. El Foro es la clara muestra de los avances de la sociedad romana en cuanto a administración urbana y en la actualidad concentra restos arqueologicos de Templos, Basilícas y monumentos de la época. A pesar de que a simple vista parece pequeño, recorrerlo lleva un buen tiempo sobre todo si uno quiere entender que es lo que ven tus ojos. El mapa es muuuuy italiano, empieza por el monumento número 27 (solo Dios sabrá por qué??) , pero una vez que le agarras la mano, la audioguía te transporta a las situaciones vividas en cada uno de ellos.

Acueductos del Foro Romano

Salimos de ahi y agarramos Via Sacra que conecta directamente el Foro con el Coliseo. No sin antes parar a admirar el Arco de Constantino, el arco del triunfo romano y sacar un millón de fotos de la maravilla que teniamos ante nosotros. No les puedo explicar con palabras lo pequeño que uno se siente al pararse frente al Coliseo, ni los niveles a los que llega tu sorpresa. Lo habíamos visto en miles de películas y ahora estaba ahí ante nosotros. Lo recorrí de punta a punta unas 3 veces, me perdí entre sus pasillos, volé con la imaginación a tiempos antiguos y trataba de reconstruir en mi cabeza la arena, las salidas de los calabozos, los palcos de los reyes. El Coliseo fué un viaje en sí!

Coliseo por dentro

Estuvimos ahí hasta las 4.30 de la tarde, después vinimos caminando por Via Imperiale, disfrutando la vista del Coliseo detrás nuestro, la del Foro Romano a un lado y sabiendo que en unos minutos llegaríamos nuevamente a la Piazza Venecia. El objetivo era llegar a ver la Fontana de noche…cuando pensas que lo viste todo, llegas a ver la fontana iluminada y te volves a soprender igual o más que cuando la viste de día. Por las dudas tiras otra moneda y pedis volver mil veces más! Fuimos a cenar por los alrededores y a pesar de estar muertos de cansancio decidimos volver caminando para ver el Coliseo de noche. Reconozco que la iluminación no es la mejor y la zona esta bastante deshabitada de noche. Igual semejante obra no llega a decepcionarte.

Fontana de noche

El tercer y último día en Roma era 24 de Diciembre!! Y si ibamos a hacerlo, lo haciamos bien: pasaríamos Navidad en el Vaticano. Yo había hecho todos los deberes, reservado la entrada a los Museos Vaticanos on line, así que ahí estabamos de acuerdo a lo planeado a las 11 am entrando a recorrer uno, sino EL museo mas rico del mundo. Para ser sincera, se necesita un mes entero y 10 horas por día para realmente apreciar lo que alberga ese museo. La falta de tiempo sumado a la cantidad exhorbitante de turistas, cada uno de ellos con una cámara, un iPad y un celular para sacar fotos hacen que se vuelva toda una experiencia religiosa. La gente ansiosa y de poca pasciencia como yo desafían ahí todos sus límites. Hicímos las galerias clásicas: La de los Mapas, la de los Papas, la Galeria Egipcia (entre el Vaticano y el Museo Británico me ahorraron el viaje a Egipto!) y obviamente hicimos la peregrinación hacía la Capilla Sixtina. Me porté mal y saqué las fotos a pesar de estar prohibido y me pase una hora entera tratando de identificar las figruas pintadas en el techo con las explicaciones de la audioguia. Realmente es una obra maestra de la pintura, no solo por lo que representa sino por el hecho de que Miguel Angel la haya pintado estando todo el tiempo suspendido en el aire. Además la Capilla Sixtina es el lugar donde se celebran los Conclaves y otras ceremonias oficiales de la Iglesia Católica.

Capilla Sixtina

Después de comer algo alrededor de las  de la tarde en uno de los tantos patios del museo, nos encaminamos a la Basílica de San Pietro. Nuestro plan era recorrerla y quedarnos para la misa. Lo que no sabíamos es que para la Misa del Gallo se requiere una entrada especial, la cual se reserva miles de meses antes. Asi que se imaginan mi decepción al saber que no iba a poder ver la Basílica por dentro. Nos quedamos dando vueltas por ahí y decidimos caminar por los alrededores y volver mas sobre la hora de la misa ya que habían pantallas gigantes y sillas dispuestas para la gente que se quedó afuera.

Basílica de San Pietro

Así llegamos al Castillo de Sant’Angelo, otro lugar hermoso coronado por un puente romano que le sirve de extensión a su entrada y donde artistas callejeros se instalan a vender sus obras. Estuvimos ahí hasta el atardecer y regresamos al Vaticano para el inicio de la misa. Nos sentamos a esperar y todo comenzó con normalidad, nos dieron una guía de misa en varios idiomas e ibamos siguiendo la ceremonia a través de la pantalla gigante. En un momento empiezo a ver a lo lejos que algunas personas salían de la Basílica y se me cruzó por la cabeza que quizás podíamos entrar. Me acuerdo que empecé a caminar y pasé por delante de la Guardia Suiza con seguridad, cual si tuviese todos los tickets necesarios. No sé bien cuanto tarde en recorrer ese camino en ascenso desde el centro de la Plaza a la entrada de la Basílica, lo único que sé es que estaba adentro viendo con mis propios ojos esos techos, esas cúpulas. La sensación fué rara, había conseguido lo que quería: estaba ahí, viendo como el Papa Benedicto ponía al niño Jesús en el pesebre a las 12 en punto y millones de personas nos deseabamos Feliz Navidad pero por otro lado tanta opulencia, tanto oro, tanta grandeza hace inevitable cuestionar el rol de la Iglesia frente a tanta pobreza en el mundo. 

Altar principal de la Basílica de San Pietro

Agotada, revolucionada, después de haber infrigido las normas del Vaticano, llena de cuestionamientos y después de cenar un sandwich de milanesa y brindar por navidad con una Sprite nos fuimos a dormir. Al día siguiente el viaje seguía, se venían mas aventuras italianas…pero eso se los cuento en el próximo post!

Años después, una espera de 7 horas en Roma me dió la oportunidad de volver a visitarla en verano…de termini en subte hacía el coliseo, solo para darle la vuelta alrededor, caminar por la Via Nazionale, pasar por el monumento a Vittorio Emanuele, caminar por Via del Corso hasta la Fontana y volver al aeropuerto! 7 horas fueron suficiente para volver a enamorarse de Roma, para confirmar que no importa cuantas veces vuelvas te sigue sorprendiendo, te sigue emocionando. 

Roma en verano!

A todos les deseo que alguna vez en la vida tengan la posibilidad de visitar Roma, de perderse en sus calles, de admirar su grandesa y disfrutarla en toda su explendor. 

Primer Destino: Escocia

Ni bien llegué a Dublin empecé a escuchar historias de como todos viajaban por dos mangos con RyanAir, la empresa low cost de origén irlandés que tiene muy buenas ofertas a pesar de que a veces terminás en aeropuertos alternativos que quedan en la loma de los quinotos jajaja.

Pero, yo debía ser un poco prudente y los primeros meses de mi estadía en Dublin me dediqué a conocer la ciudad y los pueblitos de alrededor…por suerte era verano y cada tanto Dios nos bendecía con un día de sol para poder disfrutar a full.

Después de casi 4 meses llegó mi primer viaje: el destino estaba elegido desde antemano y sin lugar a dudas era ESCOCIA. Por qué? Porque cuando tenía 8 años en mi instituto de Inglés usabamos un Libro que se llamaba “Yellow Casttle” y estaba basado en Escocia. A través de las aventuras de un nene que vivía en un Castillo fuimos aprendiendo las partes de la casa, empecé a escribir mis primeras narraciones en Inglés y sobre todo escuché por primera vez la historia del Monstruo del Lago Ness.

La llegada a Edimburgo

Como buena principiante, este viaje estuvo lleno de errores…una cree que en dos días y medio podés conocer un lugar y no es así. Al principio te preocupás mas por la cantidad, y a veces terminás corriendo de un lado a otro sin apreciar demasiado. Pero esto también forma parte de la evolución del viajero. Ahora elijo pasar tiempo de calidad en los lugares que visito, mezclarme con los locales, explorar lugares no tan turísticos que es donde realmente se ve la escencia del lugar.

Pero bueno, llegamos junto a 5 amigos un viernes de tardecita a Edimburgo. La noche escocesa (al igual que el desayuno inglés y el americano) es muy parecida a la Irlandesa. En Cow Gate, que es una de las calles principales del Casco Antiguo hay un montón de pubs con música en vivo y gente con mucha buena onda. Los Escoceses también ven en Argentina al país que le hizo frente a Inglaterra (quizás lo que tanto desean y no lo lográn por un pelito…). Me acuerdo que un grupo de chicos, obviamente un poco borrachos cantaban “If you hate the f***ing English clap your hands” (Si odias a los ingleses p**os aplaudí).

Disfrutando la noche escosesa

El sábado a la mañana temprano, con pocas horas de sueño, emprendimos un tour a las Highlands (tierras altas) y a la perlita del viaje :  El Lago Ness. El camino era simplmente increible, montañas a ambos lados de la ruta en diferentes tonalidades de verde. Para lo fanáticos de Corazón Valiente, fué en esta zona donde se filmo. También pasamos por el Castillo de Inverlochy, que data del Siglo XIII y recorrimos sus jardines y el edificio en ruinas.

Highlands

Castillo de Inverlochy

Finalmente, después de un par de horas llegamos a Iverness, la ciudad donde se encuentra el Lago Ness. Mis sueños desde los 8 años se hacían realidad. Hicimos un paseo en barco por el Lago y el guia del tour, que sabía jugar bien con nuestras espectativas hasta insinuaba que podíamos ver a Nessi. Y yo, quería creerle. En ese momento todos los personajes de mi libro de inglés se hacían realidad y esos lugares que parecían tan lejanos se volvían cercanos. Porque los viajes comienzan mucho antes, cuando uno empieza a imaginarlos en su cabeza y se disfrutan por mucho tiempo después cuando uno los recuerda, como me pasa a mi mientras escribo este post y sonrio de recordar mi emoción de niña al conocer esos lugares.

Lago Ness

Volvimos a Edimburgo muertos de cansancio después de semejante viaje pero esa noche igual salimos a recorrer de nuevo la ciudad. Estaba ansiosa por verla de día. Edimburgo es una ciudad de cuentos de hadas, es todo en subida y cuando te parás en una esquina podes mirar hacía abajo de la calle y los paisajes son increibles. Es toda señorial con edificios clásicos y taxis negros recorriendo sus calles. También vimos por primera vez las famosas cabinas telefónicas de color rojo.

El Domingo hicimos un tour caminando por la ciudad, en el cual nos contaron la historia, la realidad social, un poco de mitología y nos mostraban los lugares donde J.K. Rowling se inspiró para escribir Harry Potter.

Tren utilizado en las películas de Harry Potter

La Royal Mile, es la calle principal de Edimburgo y une el Castillo erigido en la cima de una roca volcanica que le dá una aspecto imponente y permite verlo desde varios puntos de la ciudad, con el Palacio donde se hospeda la Reina Isabel durante sus visitas diplomáticas.

La ciudad esta llena de cementerios y panteones, estos lejos de ser lugares tenerbrosos juegan un rol principal en la sociedad. Es lugar de estudio para antropólogos, de inspiración para escritores y de reunión para jovenes durante las noches de verano.

En la zona del Cow Gate, donde antes se realizaban los comercios ganaderos y mucho antes las ejecuciones públicas de brujas y delincuentes en la actualidad hay bares recordando esos sucesos.  Uno de los más conocidos es el Last Drop (último trago), en alusión al último trago que pedían los delincuentes antes de ser ejecutados.

Volví de Edimburgo enamorada. Realmente te sentís en un cuento y no me sorprende como tantas hisotrias surgieron entre sus calles y edificios. Tampoco entendí en su momento, y sigo sin hacerlo, que es lo que les impide dar el último paso para su independcia de Inglaterra. Ese año iban a tener un referendum al respecto y la gente jovén estaba muy esperanzada pero otra vez sus ideas se vieron frustradas.

Jardines de Princess st y el Castillo de fondo

De estos viajes uno aprende que a pesar de nuestras falencias, vivir en un país independiente donde se ejerce (con miles de defectos) la Democracia es impagable. Hay muchas cosas que yo, por haber tenido la suerte de nacer en un país republicano, jamás voy a lograr comprender, y por más que trato de ponerme en los zapatos de estos pueblos no entiendo como siguen prestando devoción a una familia real.  Al margén de eso, si alguna vez tienen la posibilidad visiten Edimburgo, pierdanse en sus calles, visiten el Castillo, recorran sus bares…porque es realmente de cuentos!

Ser Argentino en Irlanda

No es casualidad que yo, como muchos otros Argentinos, hayamos encontrado en Irlanda un segundo hogar. Cuando me preguntan siempre digo que los Irlandeses son los más latinos de todos los angloparlantes. Es que basada en mi experiencia, cuando vivía en Nueva York la gente te preguntaba “Cómo estás?”, pero esa pregunta solo debía ser respondida con un “Todo bien”. En cambio, en Irlanda a la gente le gusta conversar y sobre todo escuchar. Quieren saber más de vos, te piden que acerqués tu butaca en el bar para poder contarte su historia, te invitan la próxima ronda y a los dos minutos te tratan de “sweet heart” (algo asi como “corazón”). Hace 3 años trabajé en un típico pub Irlandés, esos a los que sus clientes locales van hace mas de 40 años y todos siempre se mostraron super cariñosos conmigo, de preocuparse por tus cosas, recordar que les contasté que tenías un exámen, traerte de regalo una golosina y si te cruzan por la calle pegar un grito para saludarte. De hecho, en ese pub todos me llaman Messi porque trabajaba ahí en la época del mundial.

Festejo Bicentenario Independencia Argentina 9/07/2016

 

A pesar de la distancia geográfica, existen entre Argentina e Irlanda ciertos lazos que nos llevan a hermanarnos. Ellos ven en nosotros, al otro país que se animó a hacerle frente a Inglaterra en una guerra para defender nuestros derechos y saben muy bien que las Islas son “Malvinas”. Basta decirle a un taxista, a un compañero de trabajo o a quien te escuché que sos Argentino para que te pregunten si sabías que el Almirante Brown (Fundador de la Naval Argentina) era Irlandés o que la Abuela del Che Guevara era de apellido Lynch y nació en Galway. Algo así como que los lazos revolucionarios se trasladaron por el oceáno y nos hacen similares. Es también por eso que hay muchas familias IrlandoArgentinas, y los niños crecen aprendiendo de las dos culturas.

Estatua Almirante Brown, regalo de la Naval Argentina al pueblo Irlandés

La comunidad Argentina en Irlanda no es muy grande pero nos hacemos notar. Cada 25 de Mayo o 9 de Julio en la Embajada Argentina se realizan eventos a los que asistimos, además de por el asado, las empanadas y los alfajores de maicena, para sentirnos mas cerca, celebrar nuestra Patria. Cantamos el himno con fuerza, y ese día nos sentimos en casa. A veces invadimos la Casa de la Embajadora y nos quedamos más tiempo del que debemos, pero al final de cuentas todos estamos felices y disfrutando el momento .

 

El Mundial 2014 lo viví en Dublin y puedo decir sin temor a equivocarme que fué el mejor mundial de mi vida. Me acuerdo del primer partido, el Domingo 15 de Junio que nos reunimos en un pub sobre Dame st y no eramos tantos. Como especial del día vendían empanadas y fernet, durante el entre tiempo pasaban cumbias y yo creo que me sentía en la gloria. Partido a partido aumentaba la emoción, la ilusión y también el número de Argentos asistiendo a ver el partido en el que ya denominabamos nuestro “Official Venue”. Cuando pasamos a semifinales, la emoción fue tal que salimos a festejar endemoniados a la calle, la cortamos por un par de minutos y la gente se paraba a mirarnos asombrada. Habían turistas sacandonos fotos a nosotros festejando. Fué tal el alboroto que armamos que llamó la atención de los medios locales (acuerdensé que al final de cuentas, Dublin es un pueblo grande) y la RTE2 le dedicó una sección de su programa de deportes al “fenómenos de los Argentinos en Irlanda” y termina con la relación entre ambos países. Obviamente, después de eso también nos agrandamos un poco frente a nuestros amigos de Venezuela, Mexico, etc diciendoles que no veiamos informes sobre sus comunidades en la televisión irlandesa. Nobleza obliga la confesión. No era raro ver Irlandeses con camisetas de la selección alentando en cada partido. Y todo era en clima de fiesta.

Festejos en Dame Street

Personalmente esos partidos me sirvieron para reencontrarme con gente y sobre todo conocer a Pau, mi amiga-hermana en Dublin. Todo empezó alabando la belleza de los Bosnios en el primer partido, para poco a poco ir  forjando una amistad de las más importantes en Dublin. Además en esa época vivia con una Holandesa que se venia agrandando partido a partido y cuando ibamos a jugar al semifinal se pasó varios días sobrandome, yo me aguante calladita. Pero cuando ganamos, después de celebrar en el pub volvi a casa con globos celestes y blancos (que decoraban el bar) y los colgué en el living con un cartel que decía “Vamos Argentina! Nos encanta el jugo de naranja recién exprimido”. Les juro que mi festejo personal a las 4 am cuando ella llego a casa, cantando y saltando a los gritos no me lo olvidó más. (los otros compañeros de piso tampoco).

Con la compañera de piso Holandesa

Fué durisimo perder la final, pero de nuevo rescato que la experiencia vivida fue tan buena que sigue siendo la mejor de mi historia de mundiales. Disfrutar de la pasión, ir aumentando la confianza en tu equipo, enseñarle cantos a tus amigos irlandeses, que todos se copen y usen la camiseta de tu país, que tu jefe se asegure de darte el día libre cuando jugabamos y que los viejos del pub se la jueguen en las apuestas por Argentina, en parte porque te ven emocionada…NO TIENE PRECIO!

Cuando vivis lejos de tu tierra, cualquier acontecimiento que te acerque a ella se vuelve un evento trascendental. Así ocurrió con la visita de la Fragata Libertad a Dublin, como parte de su gira mundial en Agosto de 2016. Yo nunca la había visto en persona y se me pusó la piel de gallina al verla anclada sobre el Rio Liffey. Me acuerdo que fuimos con Leo a verla y terminamos charlando con unos cabos que nos invitaron a subir y tomar unos mates en el comedor mientras escuchabamos sus anecdotas. El viernes de esa semana se hizo una fiesta en la Fragata a la que todos asistimos sin falta. Pero creo que el momento mas emocionante fue la despedida. Ese Domingo fuimos con un grupo de amigos, entre los cuales estaba Gastón, un correntino que había formado parte de la tripulación de la Fragata años atrás. Fuí testido de su reencuentro con ex compañeros y del momento en que uno de ellos mientras zarpaban, le tiro un cuchillo de los que usan para cortar las sogas que sujetan las velas, a modo de recuerdo. El despedía desde tierra a los que alguna vez fueron sus compañeros en alta mar. Ver a la Fragata alejarse por el Río, con la orquesta entonando canciones patrias y nuestra Bandera Nacional flameando en lo alto de un cielo celeste fué realmente increible. 

La Fragata Libertad dejando Irlanda

Con el tiempo, vas adquiriendo costumbres de tu nuevo país y te reis cuando naturalmente te sale un “sorry” después de estornudar, pero también les vas enseñando a los demás tus costumbres. Festejae el día del Amigo en Dublin, por ejemplo. Explicarles a todos que en Argentina la amistad es tan importante que tiene un día para ser celebrado y que podes estar ausente todo el año, pero el el 20 de Julio mas vale que te hagas un tiempo para ver a tus amigos.

Asado para festejar el día del Amigo-20/07/2016

El que viaja va aprendiendo de su nuevo lugar, celebra lo bueno y compara con casa, critica y se queja, Enaltece lo bueno del hogar, lo practica y predica. 

 

Vivir en Dublin…

Las primeras semanas en Dublin fueron un boomerang de emociones. La búsqueda de casa y trabajo genera angustia y sobre todo si, como en mi caso, te estas quedando por primera vez en un hostel. Me acuerdo que la primer semana lloraba todas las noches poque odiaba compartir el cuarto con 5 chicas más, porque queria desarmar la valija, estaba cansada de guardar todo con candado antes de irme, esperar el turno para bañarme y además tenía miedo de no encontrar trabajo.

Merrion Square

Por suerte a los 10 días de haber llegado encontramos un departamento lindo, en lo que meses después nos enteramos no era uno de los mejores barrios de Dublin. Igual como siempre digo, el concepto de “peligroso” no equivale ni a un cuarto de lo que se considera tal en Argentina. Ya con el hogar asegurado, la ropa en el closet y más tranquila continuaba la búsqueda laboral.

Enviaba alrededor de 50 curriculums por día, y la única respuesta que recibía era la automática con el mensaje de:”Gracias por su aplicación, nos comunicaremos en caso de que se adapte a nuestra búsqueda”. Entonces decidí salir a caminar la calle y dejar mi cv en los lugares que hubiera un cartel solicitando personal. Repartí y mandé tantos cvs que el día que me sonó el teléfono para una entrevista, no sabía ni de donde era. Le dije a la persona al otro lado de la linea que me enviara un mensaje con la dirección exacta para “no perderme”.

Así llegué a Rigby’s, un café chiquito, cuyo dueño era un Cheff que se cansó de cocinar lo que los dueños de los restaurantes donde trabajaba le pedían y decidió cumplir su sueño de abrir su lugar propio y cocinar lo que se le ocurría en el momento. Y cuando digo “lo que se le ocurría”, soy literal. Rigby’s era el lugar indicado para mi: James, el dueño, un inglés loco que se mudó a Dublin siguiendo a su amor (una irlandesa de Tipperari), odiaba las reglas y los estandares. No teníamos menú y todos los días cocinaba algo distinto, de acuerdo a lo que recibía de los proveedores. Así que cada vez que llegaba un cliente había que recitarle el menú del día.  Innovación constante. Además daba lugar a artistas no conocidos a que trajeran sus cuadros, los colgaran en la pared del local y los pusieran a la venta a cambio de nada. Decoración gratuita a cambio de publicidad gratuita. Win-Win. Tambión me dejaba a mi cocinar budin de pan con la receta de mi abuela y lo vendía de postre! Un genio!!

James, su esposa Louise y mis compañeros de trabajo. (Los cuadros de fondo)

Empecé a trabajar con James, de Martes a Sábado de 8am a 4pm. Juro que nunca me divertí tanto en un trabajo como con él. Aprendí un montón y siempre me acuerdo de una frase que él decía todo el tiempo: “Manners cost nothing” (Los buenos modales no cuestan nada).  Después de 5 años trabajando en el rubro de Hoteleria y Servicios te das cuenta que esa es la regla madre de la vida. No importa cuanto dinero tengas, la forma en la que tratás a los demás te define. Saludar, decir “por favor” y “gracias” no cuesta nada y hacen del mundo un lugar mejor.

Tener los Domingos libres era genial. Dublin es una ciudad rara, al ser tan chiquita sentís que en un par de semanas la recorriste de punta a punta. Pero a la vez pasa que empezas a descubrir nuevos lugares casí por casualidad y al final te sigue sorprendiendo. Sus parques, sus cafés, ni hablar de los multiples bares. Siempre aprovechaba las tardes después del trabajo para pasear, al igual que los fines de semana. Ir al Phoenix park en bici, o al Merrion Square por unos mates. Recorrer la zona a lo largo del Río, cruzar los puentes. Visitar museos. Así de a poco empezar a sentirte en casa, reconocer los lugares y empezar a elegir tus favoritos.

Con Molly Malone y el Trinity College de fondo

Una vez que ya estaba acomodada, y con el buen clima de Mayo empecé a explorar los pueblitos alrededor de Dublin. Es que con el Dart (el tren) llegas a pueblitos sobre el mar en 30 minutos. Y ahí descubrís la verdadera Irlanda. El verde por donde mires, los alcantilados sobre el mar, los bosquecitos de cuentos de hadas, la comida de mar, las caminatas interminables y por supuesto que un día soleado puede cambiar en 5 minutos al diluvio universal.

Caminata por el Bosque en Howth

Hay 2 pueblitos que son los que más me gustan y siempre los recomiendo cuando alguién me pregunta que ver cerca de Dublin:

• Bray: O mejor dicho la caminata de Greystones a Bray. Son 8 km caminando por los alcantilados sobre el mar. Realmente la vista es impagable, y si el día esta soleado es lo mejor. Es impresionante cuando el tren pasa por debajo. Y al llegar a Bray nada mejor que sentarte en la playa a tomar unos mates y charlar con amigos. Siii! Así de sencillo se disfruta por acá, basta un día soleado y un par de amigos que el Domingo se pasa mejor.

Bray desde la colina sobre el mar

• Howth: Pueblo pesquero donde se come la mejor comida de mar, fresca y deliciosa. También podes escalar los alcantilados y llegar al Faro. También cuentan con un Mercado donde podes probar comidas de todos lados (hasta conseguís churros) y hay un Castillo, como en los cuentos pero de verdad.

Alcantilados de Howth y el Faro de fondo.

St. Patrick’s Day desde Dublin ☘

Aprovechando que mañana 17 de Marzo se celebra el Día de San Patricio, decidí compartir mi experiencia relacionada a la tan conocida celebración.

Festejos de St Patrick

Mi primer encuentro con los festejos de St. Patrick fueron en Nueva York, recuerdo ir caminando a trabajar como cualquier otro día y empezar a ver a todos vestidos de verde, disfrazados de Lepreachauns (el gnomo que tiene la olla de oro al final del arcoiris) y con remeras o pins con la leyenda “Kiss me I am Irish” (Bésame, soy Irlandés). Al llegar a la 5ta Avenida, estaba todo cortado para el tradicional desfile y yo solo podía dedicarle pensamientos poco amables pues me desviaban de mi ruta normal. Era un día hermoso de primavera, soleado y la gente parecía estar disfrutando en cada esquina de Manhattan. También me acuerdo de soprenderme al ver hombres vestidos con trajes tradicionales que incluian “Kilts” (la pollera escocesa, como le decimos nosotros en Argentina), ya que en mi cabeza eso sólo correspondía a Escocia. Al margén de los cientos de borrachos alrededor de Times Sq, los bares abarrotados de gente tomando cerveza verde y muchas decoraciones con los colores de Irlanda no vi mucho mas.

Cuando me mude a Irlanda, empece a entender un poco más acerca de la influencia de San Patricio en la cultura Irlandesa. Y como dice el dicho “todo tiene que ver con todo”. San Patricio fué quien introdujo la Religión Católica a Irlanda y utilizó el trébol de tres hojas para explicarles la Santisima Trinidad. Dicho esto, nunca asocién un trebol de 4 hojas a la suerte Irlandesa, pues es considerado hasta ofensivo. A continuación les dejo un enlace de una noticia en la cual se burlan de Donald Trump por haber lanzado una linea de gorras alusivas al día de San Patricio usando un Clover (trébol de 4 hojas) en lugar de un Shamrock (trébol de 3 hojas).: http://www.telegraph.co.uk/news/2017/03/07/donald-trumps-st-patricks-day-cap-ridiculed-featuring-clover/

Desfile

Temple Bar

Al margén de las celebraciones que incluyen desfiles a lo largo de las calles principales de Dublin, muchos festivales y actividades en diferentes puntos de la ciudad, el día de San Patricio es casí una pesadilla para el Irlandés.

Un día volviendo a casa, tratando de caminar por el centro lleno de gente borracha, gritando y festejando…llegué a la conclusión de que St Patrick’s Day es para los Irlandeses lo que el Gauchito Gil es para los Mercedeños. Tu tranquila ciudad, de pocos habitantes de repente se ve sobrepasada por un número de turistas que quintiplica a los locales, los servicios se ven colapsados y por ende no queda otra que recluirte en tu casa u huir de vacaciones durante esos días.

El primer año en Dublin nevó el día de San Patricio, justo ese día cuando acá jamás nieva. Y un compañero de trabajo me contaba mientras almorzabamos que la suerte irlandesa no aplica a ellos mismos. Entre las multiples anécdotas me quedé con la de que en Chicago todos los años tiñen las aguas del Río Chicago de verde para conmemorar St Patrick. Me contaba este chico que una vez intentaron hacerlo con el Río Liffey y el resultado fué agua color violeta! Ouch!! En los 4 años que llevo viviendo en Dublin hubo uno sólo que el clima fué simplemente perfecto: sol y buena temperatura.

 

Todos los años en la Destileria de Jameson se recibe a Programas de Radio y Televisión de todo el mundo que vienen a transmitir los festejos en directo desde acá. Es tradición ya que los Perros de la Calle , que van por la Radio Metro de Argentina, vengan cada año a hacer su programa desde acá (https://www.facebook.com/pg/PerrosdelaCalle/photos) . Como Argentinos viviendo acá pasamos por todos los estadios…desde la cholules de ir a verlos hasta pedirle fotos…o venir caminando un día, cruzarte a Andy Kusnetzoff y decirle cual si fuera tu amigo de la primaria “Ey Andy, como va”, seguido de dos besos! (Si, sólo yo!)

Festejos en La Jameson

A pesar de las múltiples complicaciones climáticas los Irlandeses saben celebrar a lo grande y le ponen la mejor sonrisa a todo. Los turistas se suman a eso y haga frio o llueva a cantaros estan presentes esperando el desfile, paseando por cada punto de Temple Bar, y surgen todo tipo de situaciones.

Trinity College

Dublin’s Spire

Aunque mañana no vaya al desfile y quizás no me pinte la cara con los colores de la bandera irlandesa, aunque mis amigos más cercanos hayan decidido irse a un pueblito a pasar el finde para evitar a los turistas y aunque tengamos que elegir cuidadosamente a donde ir este finde para no sentirnos agobiados…no podemos negarle al resto del mundo la chance de disfrutar lo que nosotros vivimos todos los días. Vivir la Suerte Irlandesa, disfrutar la fiesta, emborracharse, pedir que te besen porque sos irlandés, vestirte de verde, blanco y naranja, pintarte la cara y el pelo, bailar en cualquier esquina, ver todos los edificios históricos iluminados de verde, e incluso con un poco de suerte que hay solcito!

 ☘ ☘ Happy St Patrick’s Day!! ☘☘

 

 

 

 

Céad Míle Fáilte! (Mil veces bienvenida)

La llegada a Dublin fue todo lo contrario a lo que me imaginaba (como presagiando lo que sería mi vida acá). En primer lugar había elegido venir en Abril, ilusamente esperando encontrar clima de primavera para ir adaptandome de a poco…ERROR! En Dublin sólo hay dos estaciones: INVIERNO e INVIERNO! Así que la ciudad me recibió con 6 grados, pero al menos había sol! =D

Mi primera impresión de Dublin fué: “Es está la capital del país?”. Es una ciudad pequeña, muy parecida a Corrientes capital. Todo esta asentado sobre el Rio Liffey y te moves tranquila por el casco centríco en bici o caminando. No hay edificios modernos ni grandes centros comerciales.

Después de bajarme en la calle equivocada, la South George st, cuando mi hostel quedaba en North George st (siiiii! Y a veces la misma calle cambia 3 veces de nombre) me tomé un taxi y ahi estaba yo dispuesta a sobrevivir a mi primera experiencia en hostel. Subí a la habitación, me di una ducha y decidí bajar a la sala común a conectarme con el mundo. Avisar a mi familia que llegué bien, poner el estado de Facebook que le anuncia a tus amigos que estas a salvo y contarle a quien encuentres conectado tus primeras emociones.

Por ahí en alguna esquina estaba una chica tomando mate y yo fui toda emocionada a decirle : “Hola, sos Argentina no?”…con una media sonrisa me respondió: “No, Uruguashaaa”. En 5 minutos aprendí que los uruguayos odian que los comparen con Argentinos. Eli y Nacho fueron las dos primeras personas que conocí en Dublin y hasta el día de hoy seguimos en contacto. Ahora sé que el mate tiene un proceso de preparado especial, que la yerba se tiene que hinchar, que las zapas son championes, que “salado” es algo positivo, que “paaa” es como nuestro “wue”. Y a pesar de que en estos años metí un montón de veces la pata con mi argentinidad, aprendimos a querernos y tengo Uruguay en la lista de viajes pendientes!

Unas semanas antes de venirme me había unido al grupo de Faceboook de Argentinos en Irlanda. Ser viajero es mil veces más fácil en esta época 2.0! A través de ese grupo contacté con Fede, un formoseño amigo de muchos de mis amigos de la facu que vivía en Dublin. El mundo es un pañuelo. La tarde que llegué Fede y su amigo Leo vinieron a saludarme al hostel y me explicaron todooooo. Desde donde comprar un teléfono, hasta donde ir a registrarme para que me den la tarjeta de residencia. Una especie de bendición enviada por mi ángel de la guarda personal.

Esa noche me fuí a dormir agotada, muerta de miedo y nerviosa. A medida que crecemos somos más concientes de los riesgos que tomamos y lo que dejamos atrás. Yo no tenía tanto miedo cuando me mudé a NY. La cabeza me daba vuelta con preguntas del tipo “Y si no funciona?” , “Que vas a hacer si tenés que volver?”, etc, etc.

A la mañana siguiente, por suerte otro día soleado en Dublin, salí con el mapa en mano a hacer todos los trámites necesarios para ser una residente en Irlanda. Para el mediodía tenía tarjeta de residencia, número de telefono irlandés y muchaaaaa menos plata de la que había traido. Los ahorros en dolares, al pasarlos a euros eran miserables. Panic attack mode ON!

Primer día en Dublin, en Temple Bar

Era Miercoles de tarde, menos de 24 horas en Dublin y mi ansiedad y yo estabamos desesperadas. Empece a mandar curriculums. Ahora tenía dos: el verdadero con mi experiencia real y el semi dibujado que apuntaba a trabajos de hoteleria y gastronomía.

Vale aclarar que el tiempo en Dublin pasa RARO. Ni lento, ni rápido…raro. Se vive a un ritmo diferente, al menos al principio, que te hace sentir que un millón de cosas pasan en un solo día. Que tu vida puede dar un vuelco en 5 minutos. 

Algo así fué mi primer semana. Entre buscar departamento, mandar curriculums y tratar de conocer la ciudad se pasaban los días.

Ese viernes, Fede me llamó para invitarme a un cumpleaños en el cual había asado. Yo no quería ir porque obviamente no conocía a nadie. Que suerte que me insistió!! Era el cumple de Jose y Sebas, una pareja de Salteños a los que hoy en día considero mis hermanos mayores en Dublin y que me dieron a Simón, mi sobri irlandés. Además en esa fiesta conocí a un montón de chicos Argentinos que te contaban su experiencia y te alentaban a seguir porque “En Dublin se puede vivir bien, viajar y disfrutar!” . Cuanta razón tenían.

Volví al hostel mas esperanzada y con una actividad agendada para el Domingo: Mateada Argentina en el Merrion Square. Ahí estuvimos el Domingo disfrutando de mates, charlas, y descubrí la rosca del Lidl (lo más parecido a una factura Argentina). Conocí más gente, escuché mas historias, recibí consejos, intercambié telefónos por “si sé de algo así te aviso”…

Mateada Argentina en Merrion Sq

Y me dí cuenta que no estaba sola, que todo iba a estar bien…que ellos habían estado antes como yo y pudieron. Que todos tenían casa, trabajo y disfrutaban de esa experiencia. Yo también iba a poder!! 

 

Y como dice el título del post en Irlandés : Céad Míle Fáilt roihm Dublin! = Mil veces bienvenida a Dublin! 

Volver a volar…

Pasaron dos años desde mi regreso de Nueva York hasta mi próxima aventura viajera. En esos dos años me dediqué a vivir una vida normal: recién recibida trabajé ad honoren en un Estudio Jurídico, caminé Juzgados, recorrí Registros, etc, etc. Un día me dí cuenta que no quería seguir jugando a la Abogada sin sueldo y acepté un trabajo administrativo en una Empresa Argentina de expansión multinacional. Lo veía como la puerta de entrada a futuras oportunidades de crecimiento en la Companía. Todo iba bien, de acuerdo a lo planeado, hasta que un día me topé muy de casualidad con el Programa de Vacaciones y Trabajo a Irlanda. 

Me acuerdo que leí los requisitos y al notar que los reunía todos, decidí aplicar…que podía perder aparte de los $300 del depósito? Casí sin pensarlo ni analizarlo demasiado envíe todos mis papeles y seguí con mi vida.

En el tiempo que tardan en responderte si quedaste en el programa de intercambio, mi manager me ofreció un traslado a Buenos Aires. Lo que yo buscaba, no? El objetivo por el cual había aceptado el trabajo en primera instancia: la posibilidad de crecer internamente, mudarme a Buenos Aires, hacer un postgrado, seguir tachando items en la lista de los “Debo hacer…”.

Un día de trabajo normal, alrededor de las 2 de la tarde chequeó mi mail y ahi estaba: “Nos complace informarle que ha sido seleccionada para participar del programa de intercambio de vacaciones y trabajo en Irlanda. Si desea seguir adelante con el proceso, deberá envíar su pasaporte original y boletos de avión de ida y vuelta…” Dolor de panza, exitación, nervios, ansiedad y felicidad…todo junto en un email.

Chan!! Y ahora?? Tenía que decidir que hacer, asumir que yo había aplicado voluntariamente y en mis manos estaba la decisión. Seguir adelante con el proceso o mandar un mail de agradecimiento, cerrar la ventana y seguir con mi vida de manual.

Me senté a hacer una lista de pros y contras, de esas que me ayudan a tomar las decisiones importantes de mi vida. De un lado estaban: carrera, crecimiento profesional, post grado y del otro: viajes, aventuras, nuevas experiencias.

Como siempre, no tardé mucho en decidir y mi impulsividad me llevó a una agencia de turismo al día siguiente. Era principios de Marzo de 2012 y me compré el pasaje para mediados de Abril. Llegué a la oficina y llame a mi manager. Me acuerdo sus palabras textuales cuando le conté que me iba: “Mile, me re alegro por vos. Andá y disfruta de esta experiencia que es única, al trabajo siempre se puede volver. No desaproveches esta oportunidad…”

Al día siguiente llamé a mi mamá y le conté que en un mes me iba a vivir por un año a Irlanda. Ella me dice emocionada: “Te trasladan con la empresa?”, cuando le dijé que renuncié a mi trabajo en una oficina linda, con obra social OSDE para ir a trabajar de cualquier cosa en un país que ella ni sabía donde quedaba casí le da un infarto. Pero a esa altura ya sabía que nada podía hacerme cambiar de decisión. Una vez que me propongo algo, lo hago.

Y así sin planearlo mucho, sin saber demasiado a donde iba (porque les juro que ni siquiera sabía que habían dos Irlandas, La República e Irlanda del Norte) me lance de lleno a una nueva aventura…Hoy a casí 5 años de esa partida, no me arrepiento ni un segundo de la decisión tomada, y eso no signfica que todo haya sido color de rosas. Pero luchar por los sueños no es fácil, requiere valor, determinación, fuerza y también la suerte de conocer gente en el camino que se vuelven compañeros de aventuras!